Los humedales no solo son cunas de gran diversidad biológica e importantes fuentes de vida para innumerables especies vegetales y animales, sino que también son importantes aliados a la hora de combatir el cambio climático y la sequía, «puesto que tienen la capacidad de proteger nuestras costas, filtrar y depurar la atmósfera de los ríos y suelos, y actuar como los más grandes depósitos de carbono del planeta, entre otras cosas», destaca Sebastián Benfeld, Coordinador Nacional de Escazú Ahora Chile, en un artículo de El Desconcierto.

Chile tiene una superficie de 5,6 millones de hectáreas de humedales que nos podrían ayudar a afrontar la crisis hídrica que ya estamos viviendo. Pero de estos solo el 0,17% se encuentran legalmente protegidos, según el último Inventario Nacional del Ministerio de Medio Ambiente.

Cabe mencionar que nuestro país en 1981 recién reconoce la importancia de estos ecosistemas, promulgando la Convención sobre Zonas Húmedas de Importancia Internacional, especialmente como Hábitat de las Aves Acuáticas (Convención de Ramsar).

En conversación con #EsHoy la abogada Constanza Espinosa Henríquez nos explica que el procedimiento mediante el cual el Ministerio del Medio Ambiente declarará humedales urbanos, «puede iniciarse a solicitud de los municipios o de oficio, mediante una resolución exenta que identifique estos humedales. Dicho procedimiento concluirá con una resolución exenta del Ministerio del Medio Ambiente, publicada en el Diario Oficial, que declarará el o los humedales urbanos respectivos».

La amenaza del hacha inmobiliaria

En agosto de 2021, vecinos de La Serena junto a distintas agrupaciones protestaron en contra del proyecto Ipanema de la inmobiliaria Isiete que buscaba emplazarse en las cercanías del Humedal Río Elqui. «El humedal no se vende, el humedal se defiende», era el lema de miembros de la comunidad que se manifestaron.

El megaproyecto inmobiliario contemplaba dos torres de catorce pisos con un área de cobertura de 16 mil metros cuadrados, en la que habitarán aproximadamente mil personas. Por otro lado, el lugar es considerado “zona protegida”, debido a la importante y diversa presencia de flora y fauna nativa, que se vería seriamente afectada por estas faenas.

Esto mismo intensificó las manifestaciones e incluso algunas personas detuvieron los trabajos de las maquinarias en el lugar, por lo que desde el mundo político regional salieron varias caras a defender el humedal, y recalcaron que existen facultades legales que podrían impedir la obra inmobiliaria, porque desde enero del 2021, entró en vigencia la Ley N°21.202 de Humadales Urbanos.

A raíz de lo anterior, en la resolución 960 exenta del Ministerio de Medio Ambiente, de septiembre del año 2021, se dio inicio al proceso
de declaración del humedal urbano “Desembocadura Río Elqui”, el cuál aún permanece en curso.

El Humedal de la Desembocadura del Río Elqui, constituye una extensa zona de dunas y pantanos que se inserta dentro de la zona urbana de la comuna de La Serena. Este humedal es muy rico en biodiversidad, registrándose a la fecha más de 165 especies de aves y más de 200 especies de flora.

«Este lugar presenta muchas amenazas, siendo la principal de ellas la presión inmobiliaria y vial, seguida por el turismo no regulado, la basura domiciliaria y escombros, la extracción de áridos y agua, las especies introducidas y la extracción de recursos hidrobiológicos», manifiesta la abogada en Derecho de Medio Ambiente, Constanza Espinosa.

Acelerar la protección

Espinosa insiste en que «es esencial que se dicte resolución de declaración de humedal urbano de estos ecosistemas por parte del Ministerio de Medio Ambiente, ya que significaría el resguardo de sus características ecológicas y su funcionamiento, y de la mantención del régimen hidrológico, tanto superficial como subterráneo, integrando las dimensiones sociales, económicas y ambientales».

Por su parte, la geógrafa Carolina Rojas Quezada, indica que «para este 2022 se vuelve urgente aumentar el número de humedales urbanos que son reconocidos, fortaleciendo la gestión y financiamiento para lograrlo».

En cuanto a las políticas públicas, la investigadora del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable reconoce en un artículo que «es importante que los humedales urbanos sean considerados en el Plan Nacional de Restauración de Paisajes. Además de concretar mejoras en la gobernanza, para que puedan ser incorporados en instrumentos de planificación, planes de manejo de áreas protegidas y también en proyectos de infraestructura pública».